NUEVA SERIE EN LA WEB. FUNDAMENTAL. «EL PODER DE LA ORACIÓN Y LOS SACRAMENTALES PARA LOS ÚLTIMOS TIEMPOS». Capítulo 5. La Medalla Milagrosa
Les traemos con este artículo el capítulo 5 último de la serie «El poder de la oración y los sacramentales para los Últimos Tiempos», donde Sylvia Zamora, Responsable de Oración, formación y espiritualidad en el Consejo Directivo de esta casa, nos va desgranando este tema de fe y protección espiritual tan importante en los tiempos que estamos… y en los que vienen, describiendo además al detalle los más importantes y necesarios sacramentales.
Como saben, Adoración y Liberación da una importancia suma a la protección espiritual; y a los Corazones Sagrados de Jesús y de la Santísima Virgen Maria, Corredentora del género humano, en los cuales se hallan los más importantes de los Refugios. Disfruten; aprendan; compartan. ¡Oren! Dios me los bendiga.
Vicente Montesinos.
Acceso al Capítulo 1: ¿Qué nos dice la ciencia?
Acceso al Capítulo 2: ¿Qué nos dice la Palabra de Dios?
Acceso al Capítulo 3: Los sacramentales delagua, aceite y sal benditos
Acceso al Capítulo 4: El poder de la Señal de la Cruz
Acceso al Capítulo 5: La Medalla Milagrosa
«EL PODER DE LA ORACIÓN Y LOS SACRAMENTALES PARA LOS ÚLTIMOS TIEMPOS».
Capítulo 5. La Medalla Milagrosa
Por Sylvia Zamora
La Medalla Milagrosa fue diseñada según las indicaciones de la misma Santísima Virgen María.Por esto no es de extrañar que tenga tan extraordinarias gracias para aquellos que la llevan puesta y rezan por la intercesión y el socorro de María.
5.1 LA PRIMERA APARICIÓN
La historia comienza la noche del 18 al 19 de julio de 1830.
Un niño, tal vez su ángel de la guarda, despertó a Santa Catalina Labouré una novicia en aquel entonces en la comunidad de las hijas de la caridad en París, y le pidió que fuera a la capilla.
Allí, Catalina se reunió con la Virgen María y conversó con ella por varias horas. María le dijo: “Mi niña, te voy a encomendar una misión”
5.2 LA SEGUNDA APARICIÓN
María le dio esta misión en una visión mientras meditaba la noche del 27 de noviembre de 1830.
Catalina vio a la Virgen María parada en lo que parecía ser la mitad de un globo y sosteniendo una esfera dorada en sus manos como si estuviera ofreciéndola al cielo.
Nuestra Señora le explicó, que la esfera representaba a todo el mundo, pero especialmente a Francia.
Los tiempos eran difíciles en Francia, especialmente para los pobres que estaban desempleados, y para los refugiados de las diversas guerras de ese tiempo.
Francia, fue el primer país en experimentar muchos de estos problemas, los cuales finalmente alcanzaron otras partes del mundo e incluso siguen presentes hoy día.
De los anillos en los dedos de María, mientras sostenía la esfera, salían muchos rayos de luz.
María explico que los rayos y las gracias estaban disponibles, pero nadie las había pedido.
5.3 LA TERCERA APARICIÓN Y LA MEDALLA MILAGROSA
En la tercera aparición, la visión cambio para mostrar a Nuestra Señora parada sobre un globo con sus brazos extendidos y con los rayos de luz todavía saliendo de sus dedos. Dando forma a la figura había una inscripción: “Oh María, sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti! ”
5.4 EL SIGNIFICADO DE LA PARTE FRONTAL DE LA MEDALLA MILAGROSA.
María está de pie sobre un globo, aplastando la cabeza de una serpiente bajo sus pies. Se para sobre el globo, como la Reina del cielo y de la tierra. Sus pies aplastan la serpiente para proclamar que Satanás y todos sus partidarios no tienen poder frente a Ella.
El año 1830 que aparece en la medalla milagrosa es el año en que la Santísima Virgen, dio el diseño de la medalla a Santa Catalina.
La referencia a María concebida sin pecado, manifiesta el dogma de la Inmaculada Concepción de María.
5.5 EL SIGNIFICADO DEL REVERSO DE LA MEDALLA MILAGROSA
La visión de Catalina continuó y pudo ver el diseño al reverso de la medalla.
12 estrellas rodean a una “M” grande de la que surge una cruz.
Debajo hay dos corazones con llamas surgiendo de ellos, un corazón está rodeado de espinas y el otro perforado por una espada.
Las 12 estrellas se refieren a los apóstoles que representan a la Iglesia entera en torno a María. También nos recuerdan la visión de San Juan dónde: ” Un gran signo apareció en el cielo, una mujer vestida con el sol, y la luna bajo sus pies y en su cabeza una corona de 12 estrellas”.
La cruz simboliza a Cristo y nuestra redención, con la barra bajo la cruz simboliza la tierra.
La”M” representa a María, y su inicial entrelazada con la cruz, demuestra la estrecha participación de María con Jesús y en nuestro mundo.
En esto vemos el papel de María en nuestra salvación y su función como Madre de la Iglesia.
Los dos corazones representan el amor de Jesús y de María para nosotros.
5.6 EL MENSAJE DE MARÍA A CATALINA
María dijo a Catalina: ” Haz acuñar una medalla según este modelo. Quiénes la lleven puesta recibirán grandes gracias, especialmente si la llevan alrededor del cuello”.
Catalina le explico a su confesor cada una de las apariciones con detalle.
Ella no revelo que había recibido el diseño de la medalla hasta un poco antes de su muerte ,47 años después.
Con la aprobación de la Iglesia,las primeras medallas fueron creadas en 1832 y distribuidas en París.
Inmediatamente las bendiciones que la Virgen María había prometido empezaron a derramarse sobre aquellos que llevaban puesta su medalla.
La devoción se propagó como fuego. Milagros de gracias, salud, paz y prosperidad se dieron.
Así, por tantas gracias recibidas, la gente comenzó a llamarla “La Medalla Milagrosa”.En 1836 se emprendió una investigación canónica en París declarando las apariciones auténticas.
No existe superstición, ni magia, en relación con la Medalla Milagrosa.
La Medalla Milagrosa no es un “amuleto de buena suerte”. Es un gran testimonio de fe y confianza en el poder de la oración. Sus milagros más grandes son de paciencia, de perdón, de arrepentimiento y de fé.
Dios usa una medalla, no como un sacramento, sino como un agente, un instrumento que trae consigo gracias maravillosas.
Cuando la Santísima Virgen dió el diseño de la medalla a Santa Catalina labouré le dijo:
“Ahora deben dársela a todo el mundo y a cada persona.”
Son incontables los testimonios sobre las bendiciones que se han recibido de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa.
5.7 CONSAGRACIÓN Y ORACIONES A NUESTRA SEÑORA DE LA MEDALLA MILAGROSA.
ORACION DE CONSAGRACIÓN
Postrado ante vuestro acatamiento, !Oh, Virgen de la Medalla Milagrosa! y después de saludaros en el augusto misterio de vuestra concepción sin mancha, os elijo, desde ahora para siempre, por mi Madre, Abogada, Reina y Señora de todas mis acciones y Protectora ante la majestad de Dios.
Yo os prometo, Virgen Purísima, no olvidaros jamás, ni vuestro culto ni los intereses de vuestra gloria, a la vez que os prometo también promover en los que me roden vuestro amor.
Recibirme, Madre tierna,desde este momento y set para mí el refugio en esta vida y el sostén a la hora de la muerte.
Amén
ORACION PARA OBTENER UNA GRACIA ESPECIAL
¡Oh María, consuelo de cuántos os invocan! Escuchar benigna la confiada oración que en mi necesidad elevo al trono de vuestra misericordia.
¿A quién podré recurrir mejor que a Vos, Virgen bendita, que solo respiráis dignidad y clemencia, qué dueña de todos los bienes de Dios, solo pensáis en difundir los entorno vuestro?
Sed pues mi amparo, mi esperanza en esta ocasión, y ya que devotamente pende de mi cuello la Medalla Milagrosa, prenda inestimable de vuestro amor, concededme, Madre Inmaculada, concédeme la gracia que con tanta insistencia os pido.
ORACIÓN PARA OBTENER LA CURACIÓN DE UN ENFERMO.
¡Oh María, sin pecado concebida, cuya inmensa bondad y tierna misericordia no excluye el alivio de este amargo fruto de la culpa que se llama enfermedad de la cual es con frecuencia víctima nuestro miserable cuerpo! ¡Oh Madre piadosa, aquí en la Iglesia llama confiada! ¡Salud de los enfermos!
Aquí me tenéis implorando vuestro favor. Lo que tantos afligidos obtenían por la palabra de vuestro Hijo Jesús, obténgalo este querido enfermo, qué os recomiendo, mediante la aplicación de vuestra medalla.
Qué su eficacia, tantas veces probada y reconocida en todo el mundo, se manifieste una vez más: para que cuántos seamos testigos de este nuevo favor vuestro, podamos exclamar agradecidos: “la Medalla Milagrosa le ha curado”
Amén