Iglesia en Nicaragua, ¿el comienzo de lo que nos espera a los cristianos?
La abogada Martha Patricia Molina Montenegro es la autora del informe “Nicaragua: ¿una iglesia perseguida? (2018-2022)”, que recopila 190 ataques contra la Iglesia Católica en el país, perpetrados por turbas a fines al régimen, cuyo dictador siempre ha odiado a la Iglesia Católica y a la fe.

La abogada Martha Patricia Molina Montenegro, integrante del Observatorio Pro Transparencia y Anticorrupción, denunció que actualmente Nicaragua atraviesa “una dictadura demasiado sangrienta” bajo Daniel Ortega y Rosario Murillo, quienes usurpan la presidencia de Nicaragua.
El Presidente de Nicaragua Daniel Ortega y su mujer Rosario Murillo.
La abogada Martha Patricia Molina Montenegro es la autora del informe “Nicaragua: ¿una iglesia perseguida? (2018-2022)”, que recopila 190 ataques contra la Iglesia Católica en el país, perpetrados por turbas a fines al régimen, cuyo dictador siempre ha odiado a la Iglesia Católica y a la fe.
En menos de cuatro años, la Iglesia Católica en Nicaragua sufrió 190 ataques y profanaciones, entre ellos un incendio en la catedral de Managua, además de acoso policial y persecución a obispos y sacerdotes bajo el régimen del presidente Daniel Ortega.
La investigación “Nicaragua: ¿una Iglesia perseguida? (2018-2022)” de la abogada Martha Patricia Molina Montenegro, integrante del Observatorio Pro Transparencia y Anticorrupción, advierte que “el papel de la iglesia católica ha sido fundamental en la crisis de vulneración de derechos humanos que enfrenta Nicaragua”.
Como respuesta a este papel de la Iglesia Católica, indica el informe de Molina Montenegro, el régimen de Daniel Ortega, que gobierna Nicaragua ininterrumpidamente desde 2007 de la mano de su esposa Rosario Murillo, “inició una persecución indiscriminada en contra de obispos, sacerdotes, seminaristas, religiosas, grupos laicales y hacia todo lo que tenga relación directa o indirecta con la Iglesia católica”.
El documento recuerda la crisis que estalló en abril de 2018, con protestas en Nicaragua por una serie de reformas al sistema de seguridad social, que aumentaba la contribución de empresas y empleados, así como deducciones a los jubilados.
Las manifestaciones comenzaron en la ciudad de León y se fueron extendiendo por todo el país.
La violenta represión del gobierno, recuerda el informe de Molina Montenegro, dejó al menos 355 muertos.
En 2021, en medio de denuncias de fraude y de persecución política contra sus contendores, Ortega se reeligió por tercera vez como Presidente de Nicaragua.
Martha Patricia Molina Montenegro recordó que “antes de abril 2018 los atropellos hacia la iglesia eran esporádicos. Después de esa fecha, las hostilidades incrementaron y suben de tono”.
“El lenguaje ofensivo y amenazante de la pareja presidencial contra la jerarquía católica se hicieron cada vez más evidentes y frecuentes; y las acciones de algunas instituciones públicas en contra del trabajo caritativo de la iglesia incrementaron”, señaló.
Aunque “no podemos afirmar que todos los percances compilados en este estudio han sido planeados y ejecutados por los seguidores de Ortega-Murillo”, dijo, “tampoco se puede alegar la no culpabilidad”.
“Lo cierto es que en años anteriores a que el presidente Ortega asumiera el poder, no se realizaban esos ataques frontales en contra de la institución religiosa”.
El informe de Molina Montenegro señala que en 2018 se registraron 46 ataques contra la Iglesia Católica, entre ellos el ingreso de una turba a la catedral de Managua, amenazas de muerte a sacerdotes nicaragüenses y profanaciones de distintos templos.
En 2019 ocurrieron 48, entre los que destacan amenazas de muerte contra monseñor Silvio José Báez Ortega, obispo auxiliar de Managua, que ese mismo año se tuvo que exiliar fuera de Nicaragua.
En 2020 se produjeron 40 ataques contra la Iglesia, entre ellos profanaciones y el ataque con una bomba molotov a la catedral de Managua, dañando la capilla de la Sangre de Cristo.
En 2021 se registraron otros 35 ataques, incluyendo profanaciones y robos en iglesias, así como insultos de Daniel Ortega contra los obispos y sacerdotes católicos.
En lo que va de 2022 ya se han contabilizado 21 ataques, entre los que se encuentran el acoso policial contra monseñor Rolando José Álvarez, obispo de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, en mayo de este año.
La última actuación de este gobierno ha sido la expulsión esta semana de las monjas de la orden Misioneras de la Caridad, fundada por la Madre Teresa de Calcuta, que abandonaron Nicaragua después de que el gobierno de Daniel Ortega cerrara su asociación junto con otras organizaciones benéficas y civiles.
Las monjas fueron escoltadas por la policía hasta la frontera y cruzaron a pie a la vecina Costa Rica después de ser obligadas a disolver la agrupación y cerrar sus obras benéficas.
Su organización es una de las últimas que han sido clausuradas en el marco de la ofensiva del presidente Daniel Ortega contra sus opositores.
Nosotros seguiremos denunciando todo esto, para que la gente sepa lo que pasa en el mundo.
Os dejamos a continuación las denuncias realizadas desde Adoración y Liberación a cerca de lo que está pasando en este país.
Aquí recordamos un articulo de nuestro director Vicente Montesinos publicado 19 de julio 2018, donde se destacaba el silencio del Vaticano ante los ataques a la Iglesia de Nicaragua.
Nicaragua… ¡Qué error el mío! ¡Sí que ha habido un comunicado del Vaticano!
Y aquí recordamos la denuncia realizada por Alejandra Mesén, corresponsal de Adoración y Liberación en Costa Rica, ante el ataque a la Catedral de Managua en Nicaragua. Video del 1 de agosto del 2020.
Imagen del ataque a la Catedral de Managua (Nicaragua)
¡¡ADORADO Y DESAGRAVIADO SEA JESÚS HOSTIA AHORA, SIEMPRE, AQUI Y EN TODO LUGAR!!