Santo Tomás de Aquino y la existencia de Dios ( 1225-1274)
Se cree que antes de morir pidió quemar toda su obra filosófica, pues la consideraba "nada" después de una experiencia mística que tuvo unos meses antes el día de San Nicolás de Bari.

Por el Pequeño Cirineo.
Santo Tomás Nace cerca de Aquíno ( Nápoles).
Hijo de los condes de Aquino desde muy pequeño fue encomendado al cuidado del Abad del Monasterio de Montecassino.
Pronto manifestó su intención de entrar en la orden religiosa de los dominicos.
Su familia no acepta esta decisión pues esperaban para él un futuro más brillante en la iglesia, su madre intento disuadirle por todos los medios, pero él estaba decidido a ingreso en la orden en el 1244.
Estudio en Nápoles con Pedro de Ivernia el cual lo introdujo al estudio de Aristóteles.
Más tarde estudió en la universidad de París desde el año 1245 al 1248. De allí fue a Colonia ,acompañado de San Alberto Magno que había sido ya su maestro en París.
Su vida transcurrió entre Italia y París. Se dedicó al estudio y a la contemplación, e introdujo en Occidente la obra de Aristóteles, construyendo una síntesis tan prodigiosa, que creo una forma propia “el tomismo”que fue aceptado más tarde por la Iglesia como filosofía oficial.
Murió a los 49 años cuando asistía al “Concilio de Lyon”, fue asesor del Papa Gregorio X.
Se cree que antes de morir pidió quemar toda su obra filosófica, pues la consideraba “nada”después de una experiencia mística que tuvo unos meses antes el día de San Nicolás de Bari.
Santo Tomás decía que el hombre ha de buscar la razón hasta dónde esta alcance. Su actitud fue siempre conciliatoria y moderada, las verdades de la razón no sólo no tienen porque oponerse a las verdades de fe, sino que estás complementarán aquellas.
El hombre es un ser racional y ha de ejercitar la razón hasta donde pueda, también en el terreno y en la indagación de la búsqueda de Dios.
Admitiendo que las verdades de fe como la Trinidad ,la Encarnación… etcétera son verdades que pertenecen al campo de lo revelado, la razón será aquí una auxiliar que permitirá con sus propios medios y procedimientos lo que se llama los “”preambula fidei”.
Aquellos presupuestos básicos sobre las que las verdades posteriores han de asentarse.
Por tanto antes de saber si Dios es UNO y TRINO hay que saber primero que ES, es decir que EXISTE , porque hasta ahí sí que llega la razón.
La razón conoce la existencia, pero no la esencia de Dios dice Santo Tomás. En lo referido a la existencia la razón puede ejercer su fuerza demostrativa y conducirnos hasta Dios de una manera racional y ordenada ,partiendo de las cosas sensibles hasta llegar al Hacedor y Creador de esas mismas cosas.
Pero saber qué es realmente Dios definir su esencia ,no pertenece al ámbito de la razón que la excede.
El hombre no está capacitado por su razón para conocer la esencia de lo divino, y aquí nos deberemos apoyar en lo que la fe dice sobre Dios. A la razón no le quedará más que siguiendo a Dionisio, una vía apofática, una vía de negaciones, es decir, predicar de Dios más bien lo que no es ,que lo que es.
Resalta que conocemos a Dios por analogía, ya que el conocimiento que el hombre puede tener de Dios a través de la razón, es un conocimiento por analogía. Si Dios fuera absolutamente lo otro desconocido e ignoto y que sólo Él pudiera conocerse a sí mismo, entonces el hombre no podría ni siquiera imaginar que es Dios, lo que es un concepto” equivoco “de Dios.
Es evidente que Dios y el hombre no se identifican de manera absoluta, por lo tanto el conocimiento que tenemos de Dios es por analogía, es decir que hay algo que no se identifica con la divinidad a través de lo cual podemos conocer a Dios y conocernos a nosotros mismos, y hay algo que nos hace totalmente distintos a la divinidad, y es nuestra condición de criaturas que nos lleva a buscarlo y amarlo.
La importancia de la filosofía de Santo Tomás ha sido enorme ya que su influencia sigue hasta nuestros días.
Santo Tomás alcanza la excelencia de la filosofía y la Iglesia católica lo ha considerado como paradigma de toda actitud intelectual.
Que Dios te bendiga
El santo más sabio de los santos y el más sabio de todos los santos