Los obispos españoles configuran una asignatura de “Religión” al gusto de Bergoglio y “borrando” a la doctrina católica de la educación de los niños
En Primaria, el borrador de currículo propone que los alumnos adquieran «hábitos para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la mejora de la convivencia y el cuidado del planeta». Se plantea también que desarrollen una visión de la interdependencia, ecodependencia e interrelación.
Vicente Montesinos
Director de Adoración y Liberación
La Conferencia Episcopal Española (CEE) presentó este lunes los borradores del nuevo currículo de la asignatura de Religión para las etapas de Infantil, Primaria y Secundaria. Se trata solo de una propuesta, que ahora estará abierta a la consulta pública de toda la comunidad educativa hasta el próximo 21 de octubre.
En los borradores los obispos españoles plantean que la enseñanza de la Religión Católica sirva de herramienta para «el diálogo y una convivencia respetuosa en una sociedad democrática cada vez más plural».
El borrador expresa el deseo de los Obispos españoles de que los menores avancen, entre otras muchas cuestiones, «en el desarrollo de su afectividad, el reconocimiento de la plena igualdad entre niños y niñas, y la adquisición de hábitos de vida saludables”
En Primaria, el borrador de currículo propone que los alumnos adquieran «hábitos para el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la mejora de la convivencia y el cuidado del planeta». Se plantea también que desarrollen una visión de la interdependencia, ecodependencia e interrelación; y «tomen conciencia de las situaciones sociales injustas y desarrollen actitudes de solidaridad y misericordia para crear entornos de convivencia agradable e inclusiva.
Con el objetivo de que los estudiantes «aprendan a habitar un mundo plural», los obispos que nos avergüenzan plantean además que la asignatura les ayude a «desarrollar respeto por la multiculturalidad y la diversidad religiosa» y que «sean capaces de apreciar y analizar obras de arte, composiciones musicales, y construcciones arquitectónicas representativas de otras culturas y religiones».
Para la Secundaria pretende que los jóvenes entre 12 y 16 años sean capaces de participar «críticamente en la construcción de la diversidad cultural, expresando y aportando creativamente las experiencias propias, respetando las diferencias entre personas y comunidades». Sugieren también que los alumnos puedan favorecer «la convivencia social en contextos plurales respetando las opciones personales y generando espacios de diálogo y encuentro».
La Conferenca Episcopal asume así todo el vocabulario demagógico de la izquierda, y sigue las directrices de la apóstata jerarquía bergogliana, dedicando gran parte de su esfuerzo al mantra de Bergoglio: la sostenibilidad y el cuidado de la “casa común”
Los obispos recuerda además que «el Pacto Educativo Global del Papa Francisco, y las encíclicas ‘Fratelli tutti’ y ‘Laudato Si’ cuentan con claves que coinciden con los marcos civiles de la Unesco y el Consejo de Europa». «Siempre hemos querido hablar el lenguaje de la escuela y eso es lo que tenemos que hacer desde nuestra asignatura”- afirman los obispos españoles.
Pese a que la competencia en la elaboración del currículo de Religión Católica recae en la Conferencia Episcopal, los obispos decidieron el pasado mes de febrero celebrar un foro on line para oír las propuestas de los expertos sobre la asignatura. En esas mesas redondas, celebradas bajo el título ‘Hacia un nuevo currículo de Religión’, surgieron más de 700 propuestas, que luego distintos grupo de trabajo de la Conferencia Episcopal utilizaron para elaborar el borrador de los currículos.
Entre los asistentes a ese foro figuran, entre otros, el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana; del gobierno social-comunista de España; el excoordinador federal de Cristianos Socialistas, Carlos García de Andoín y la teóloga y pedagoga, Carmen Pellicer Iborra, directora de Cuadernos de Pedagogía y presidenta de la Fundación Trilema.
Los políticos del divorcio, la pornografía, el aborto, la eutanasia, las drogas, la corrupción de menores y un sinfín de calamidades satánicas han sido “educados” en un grandísimo porcentaje, como muchos mercaderes y poderosos sin escrúpulos de toda clase de males, en colegios del Opus Dei, jesuítas, marianistas, salesianos, etc. Se les ha enseñado SOCIALISMO, es decir, doctrina social de la Iglesia (impuesta, que no salida de almas fieles al Señor) o bien se ha dedicado la hora de Religión a no hacer nada de nada. Así durante décadas. No se les ha dado enseñanza de los cuatro Santos Evangelios a los alumnos, nada de Nuevo Testamento, nada de Sagradas Escrituras, nada de Salmos ni nada de Jesucristo Nuestro Señor, Dios Verdadero, ni de la Santísima Virgen María, ni de los santos y santas en las aulas. No se les ha enseñado a los alumnos a conocer y amar a Dios sobre todos y todo. Solo POLÍTICA, o bien de derechas (liberal conservadora) o bien de izquierdas (marxismo), pero Dios, la Virgen María y todo santo o santa, han quedado excluidos y expulsados de las aulas. Y cada vez se insiste más en esa deriva. Parece que se quisiera convertir la Iglesia en una especie de opción política en busca de afiliados. ¿Hasta cuando tendremos que soportarlo?
Inculcan lo de la SOLIDARIDAD, que no figura en el NUEVO TESTAMENTO en lugar alguno. Se excluye la CARIDAD cristiana, bien descrita por San Pablo.
Inculcan la JUSTICIA SOCIAL, pero lo de la verdadera JUSTICIA que ha de ser hecha en secreto y sin que nuestra mano izquierda sepa lo que hace la mano derecha, nada, desprecio absoluto.
Inculcan el PRINCIPIO DE SUBSIDIARIEDAD, es decir, la sumisión TOTAL a la POLÍTICA Y LOS POLÍTICOS. De adoración a DIOS TODOPODEROSO, a Nuestro Señor Jesucristo, nada de nada.
Inculcan lo del BIEN COMÚN, común a todos los dictadores democráticos corruptos como satanás, que imponen su antievangelio a los papas, cardenales, arzobispos, obispos y sacerdotes con a saber qué amenazas, INSTRUMENTALIZANDO la fe en beneficio propio, como hicieron los escribas y fariseos con Caifás al frente.
La Palabra de Dios está cada vez más ausente de los centros educativos como los crucifijos de todo edificio público, con las consecuencias horrorosas que ello tiene, pues sin Dios nada podemos. La Santa Ira de Dios Todopoderoso debe estar al caer, porque esta situación ya no se puede sostener ni un solo momento más. Hoy la mies es mucha, los obreros han sido expulsados de la Iglesia por ser fieles a Jesucristo y no doblegarse al demonio y sus secuaces, y los incendiarios abusan y sobreabusan de su autoridad mal usada, arrastrando almas al fondo del infierno. O DIOS NOS SALVA o aplíquese aquello de que “Si aquellos días no se abreviasen, no se salvaría nadie”.
MARANA THA.