Historia de la imagen bendecida por Benedicto XVI en Guadalupe. Por Andrea Serrano

Por Andrea Serrano
Corresponsal AyL México
Dentro de la Basílica de Guadalupe en la ciudad de México se encuentra esta imagen realizada por el artista italiano Franco Faranda en el año 2008.
El 11 de noviembre del mismo año, el Papa Benedicto XVI la bendijo para todos.
Gracias al apoyo del Instituto italiano de Cultura de México la obra fue donada a la Insigne y Nacional Basílica de Santa María de Guadalupe y colocada el día 9 de diciembre del 2009 por el arzobispo Norberto Rivera Carrera.
Simbolismo :
La Virgen aparece representada como una joven cuya edad aproximada es de 18 a 20 años.
Su rostro moreno y en actitud de profunda oración, refleja amor ternura y fortaleza.
Lleva el cabello suelto, lo que entre los aztecas era señal de una mujer aún doncella Virgen.
Sus manos están juntas, en señal de recogimiento.
Esta embarazada, lo que se constata por la forma aumentada del abdomen y el cíngulo negro atado, pues era el símbolo de maternidad que llevaban las indígenas encinta.
Al centro de su túnica, se visualiza una flor de cuatro pétalos o Nahui Ollin, que era el máximo símbolo nahuatl y aludía la presencia de Dios, así como la plenitud, el centro del espacio y del tiempo.
En la imagen la Virgen es presentada como la Madre del arraigadísimo Dios, por quien se vive y marca el lugar donde se encuentra Nuestro Señor Jesús, en su vientre.
La Virgen de Guadalupe se muestra como la describe san Juan Evangelista, en su visión apocalíptica: una mujer vestida de sol por eso se encuentra rodeada de rayos con la luna bajo sus pies y una corona.
Las estrellas del manto representan el firmamento para ofrecer con el, protección a todo el mundo y se identifican las 46 estrellas más brillantes que cubren el horizonte del Valle de México.
Un caballero águila esta a los pies de la Virgen, con ademán de quien acaba de volar. Las alas son asimétricas y muy coloridas, los tonos son parecidos a los del pájaro mexicano tzinitzcan que Juan Diego escucho, anunciándole la aparición de la Virgen de Guadalupe.
¡Que Dios los bendiga!