LOS TIEMPOS DEL ANTICRISTO (X) La Apostasía Final. Por Daniel Ponce Alegre
'' Cuando vuelva el Hijo del Hombre, ¿Encontrará la Fe sobre la Tierra? ''.

Los Tiempos del Anticristo (X)
La Apostasía Final
Daniel Ponce Alegre
Teólogo – Pontificio Instituto Bíblico y Oriental
” Cuando vuelva el Hijo del Hombre,
¿Encontrará la Fe sobre la Tierra? ”.
Estas palabras de Nuestro Señor Jesucristo, recogidas en el Evangelio según San Lucas, capítulo 18 y versículo 8 (junto a las pronunciadas por San Pablo relativas a que la Apostasía precederá al Anticristo) nos indican que el Tiempo del Fin, antes del Retorno de Jesucristo, será muy difícil, tan difícil que ”si los días no fueran acortados ninguna carne se salvaría”.
Estas palabras hicieron que algunos teólogos y exégetas, no mal intencionados muchos de ellos, pensaran que la Misión podría fracasar.
Sin embargo, algunos ”pérfidos sepulcros blanqueados” las usaron para desanimar a los hermanos, tratar de alejarlos, relajarlos, enfriarlos o, si era posible, hacerlos volver a las tradiciones judaicas; fueron los judaizantes de los que hablaban los Apóstoles y que aún hoy maquinan.
Esta interpretación de las palabras de Jesús siempre ha omitido y olvida que la Iglesia no sólo la formamos los fieles bautizados, y que aún estamos en el mundo, sino aquellos fieles ya en el Cielo y todos los Santos: la Comunión de los Santos que interceden por nosotros.
Considerando esta verdad de fe, si se diera el caso que en la Tierra hubiese una Apostasía total y generalizada antes del Retorno del Rey, Jesucristo, esto no supondría la derrota pues Él ya ha resucitado de entre los muertos, y con Él muchos, los santos y benditos del Padre que ”claman por la sangre de los inocentes”.
En todos los tiempos ha habido apóstatas y herejes dispuestos a sembrar el error y a incitar así a la defección.
En la actualidad estos elementos pérfidos y crípticos se encuentran en las redes sociales y entre los llamados ”tradicionalistas o tridentinos”, pero alejados de la fuente que es la Iglesia Católica.
Ellos, como sucedía en la antigüedad, pertenecen a sociedades secretas gnósticas y esotéricas de toda naturaleza, judaica o no.
Citando de nuevo a San Pablo, nos advierte de ”aquellos que os perturban y deforman el Evangelio de Cristo” (Gal. 1, 7)
Esta situación tan compleja y de imposible solución humana tiene un peligro:
La Apostasía por relajación o por pérdida del fervor primitivo. Jesús nos advierte en Apoc. 2:4 ”Tengo esto contra ti: que has perdido el amor que tenías al principio”.
Los Padres de la Iglesia siempre señalaron que las llamadas ”tres concupiscencias”: de la carne, de los ojos y la soberbia de vida son la raíz de la actitud relajada o acomodaticia que lleva a la Apostasía.
Cuando los cristianos no asumimos en plenitud nuestra Misión dentro de la Iglesia y al servicio de Ella, estamos abocados a la Apostasía que ha preparado el camino a esta Generación del Anticristo, una Generación que tiene agentes apóstatas tanto en política, en la finanza, como en medios de comunicación o redes sociales. Actúan, no sólo ignorándolo en la redacción de las leyes u oponiéndose en ellas a la Ley de Dios y Ley Natural sino diciendo que todas las tradiciones son igualmente respetables e incluso que ”todas las religiones son iguales”.
Esta es la máxima expresión y prueba del Reinado del Anticristo, salida de la Sede de Pedro haciendo funciones de Falso Profeta. A ella unimos el llamado ecumenismo, en el que la ”abominación desoladora se sienta en el Lugar Sagrado” que es el Altar.
El Encuentro de Asís de los años 80 fue la evidencia más visible… hoy es la llamada Casa de las Religiones promovida por la Santa Sede que sustituye a Jesucristo como Fuente de Verdad y Vida. ESTA ES LA APOSTASÍA FINAL.
Y todavía miles de católicos, devotos, de misa diaria o solo dominical, NO LO VEN ! Ni se enteran de lo que pasa en Roma y de lo que sale de allí ! Esta ignorancia hace perecer al pueblo…y como estamos como ovejas sin pastor, y sin pastores, porque los sermones que yo escucho dan pena…