Reflexiones surgidas en oración. Apocalipsis 5, 13
Reflexiones surgidas en oración, a partir de una visión o sueño de la hermana Mercedes y de interpretaciones del hermano Abraham.
Liliana García
Adoración y Liberación
San Juan apóstol, ruega por nosotros en esta hora del mundo y de la Iglesia verdadera de Cristo, tú que escuchaste las palabras en los truenos de la última trompeta, y que el Señor te indicó no escribirlas, pues el misterio grande de Dios anunciado por los profetas se cumpliría en aquel instante que Dios disponga, inmediato a la última trompeta ” sin más demora” ( Apoc 10, 4_7).
Tal como lo anunciara también el Apóstol San Pablo, refiriéndose también a aquello ” misterioso” ( 1 Cor 15, 51), y que “en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta, porque si que sonará la final trompeta, y seremos transformados ” (1 Cor 15, 52).
¡Rueguen santos apóstoles de Cristo que vieron nuestro tiempo, rueguen por nosotros!
Y que aquello todo que acontezca nos encuentre, como está escrito, adorando al Cordero y al que se sienta en el trono con todo su Poder y su Espíritu de Amor y Gloria, y nosotros estemos adorando junto a los 4 seres vivientes, a los 24 ancianos, y a todos los seres de la Creación (APOC 5, 13)
Es un misterio el día y la hora, pero es también nuestra “Esperanza Bendita”, por eso, rueguen Santos y ángeles de Dios, todos, para que aquel misterio de aquella última trompeta, descripto por los Apóstoles San Juan y San Pablo, nos encuentre cumpliendo este capítulo de APOC, 5, 13.
“Este es el tiempo de aguantar de los santos, de los que guardan los mandamientos y la fe ” ( Apoc 14, 12)
¡Santo, santo, santo es el Cordero!
