Mis superiores, Trump, el aborto, la tolerancia, la violencia de género, la corrección política, y el hastío.

Vicente,voy a tratar de dar otro enfoque.
Lo grave,gravísimo,es la indiferencia,la reacción de aquellos sapientísimos atenienses del areópago,ante Pablo:Ya nos hablarás de eso otro día..
Cuando la reacción es violenta,visceral,…,hay que leer entre líneas…Dice Platon que el perro es un animal filosófico,porque se inquieta y ladra ante todo lo que desconoce.Sí:Cuando la gente ladra,no está todo perdido…
En cuanto a la tolerancia,hay que distinguir cuidadosamente,como preceptúa el principio.
La tolerancia positiva,naturalmente que es mala,pues en el fondo no es otra cosa que relativismo disfrazado.Es la propugnada por la masonería.Pero también existe la tolerancia negativa,que es condición sine qua non de la libertad humana,y que el Señor ejerce continuamente,,,,hasta el día del Juicio y la siega.Si no fuera así,nuestra libertad sería imposible,dado que Dios es Omnipotente y estaría continuamente abortando todos nuestros intentos de salirnos de su Plan.A sus hijos nos resta afanarnos en recordar a nuestros hermanos,y a nosotros mismos,cuál es ese Plan,y que acciones y leyes se oponen a él,dejando que el Señor hable a través nuestro.
Abrazo fuerte.

Sí,Rafael.Esa es la tolerancia que Dios ejerce continuamente.
Dice Charles Peguy,con sus servidumbres de chauvinismo frances,que,el Señor,para tener corazones tan rendidamente rendidos a Él,por amor,por elección,como los de san Luis rey o santa Juana de Arco,tuvo que pagar el peaje de consentir,de tolerar,la existencia de Nerones y de Caligulas…

Son manotazos de ahogado, Vicente: lo de tu superior, lo de El País, lo de Roma tratando de blindar un pontificado en descomposición…
“¡Despierta, espada, contra mi pastor, y contra el hombre de mi compañía!, oráculo de Yahveh Sebaot. ¡Hiere al pastor, que se dispersen las ovejas, y yo tornaré mi mano contra los pequeños!
Y sucederá en toda esta tierra – oráculo de Yahveh – que dos tercios serán en ella exterminados (perecerán) y el otro tercio quedará en ella.
Yo meteré en el fuego este tercio: los purgaré como se purga la plata y los probaré como se prueba el oro. Invocará él mi nombre y yo le responderé; diré: «¡Él es mi pueblo!» y él dirá: «¡Yahveh es mi Dios!»”
Za 13,7-9

Hace tiempo comenté que el Gran Aviso está a las puertas y últimamente esa certeza se me vuelve abrumadora, como si Dios estuviera preparando el alma para ese acontecimiento. Ocurrirá cuando la humanidad esté preparada pero ojalá no me equivoque y sea inminente. Preparémonos persiguiendo la santidad como nunca, huyamos del pecado como nunca, escapemos del mundo tan lejos como sea posible porque el Enemigo está desatado bombardeando por todos los flancos y en cualquier ocasión, señal de que su tiempo está prácticamente extinguido… La intensidad de la batalla espiritual que estamos viviendo no tiene precedentes, pensad en María, buscadLa con la misma desesperación que un niño busca a Su Madre cuando se cae o se pierde, imploradLa, respiradLa, llenaos de Ella porque es la Mujer vestida de sol con potestad para reunir a los elegidos del Señor en Su Inmaculado Corazón, el nuevo Arca para estos días únicos que transitamos… Y llenémonos de Jesús sacramentado. Este doble blindaje es más necesario que nunca y el Señor nos lo pone en la mano separando así el trigo y la cizaña.
Un abrazo Vicente, gracias por este lugar lleno de luz en el que espero participar todo lo que me sea posible.